Oohhh, negra navidad

diciembre 26, 2007

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Bienvenido a la república independiente del Estrecho de Gibraltar. El New Flame, un basurero flotante de chatarra que surcaba los mares hasta que encalló frente al Peñón en agosto, nos felicita las fiestas con 91 toneladas de mierda, o lo que en otra época se dio en llamar chapapote, que estos días pueden encontrarse en las playas de Getares y El Rinconcillo, de Algeciras. Lo peor está por llegar. La mitad del barco que aún está a flote amenaza con hundirse en breve y nadie sabe lo que hay dentro. Es como un juego, como el juego de las cajas de la tele: quizá haya conejitos de Duracell, quizá raquetas de padel para Madagascar, quizá parachoques de Talbot que ya no se venden en los desguaces o quizá restos de armamento nuclear. A las ballenas les encanta todo porque así pueden jugar. 

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Mientras, los políticos siguen espurreando demagogia a propulsión para ver si con un pelín de suerte el marrón elemento se acumula en la acera de enfrente. Lo apunta, claro, Téllez en su artículo La soberanía del New Flame.

«Esta es una de las zonas marítimas más concurridas y, por lo tanto, más peligrosas del planeta. Pero nos gusta el más difícil todavía. Cualquier día de estos estallará Gibraltar con o sin el HMS Tireless o Rota amanecerá bajo un hermoso hongo atómico. Y los analistas de la actualidad, entre quienes supuestamente me encuentro, sólo nos preguntaremos a quien beneficia o perjudica electoralmente el pim-pam-pum.» […]

9 respuestas to “Oohhh, negra navidad”

  1. Violeta Says:

    El problema de los políticos aunque parezca mentira es que son todos feísimos, ya te lo digo yo. Los feos nunca tienen demasiado que perder.

  2. enderwiggin Says:

    y qué me dices de sarcozy?

  3. Edu Laporte Says:

    Un estudio de Yahoo (atentos a la fuente) decía que las mujeres buscan el poder (en los hombres) y los hombres la belleza (en las mujeres). Quizá así se entienda la reciente relación de Sarko con Bruni, que pa’ mi que tenía mejor gusto. El poder embriaga a ciertas damas, como embriaga la peña que se sube a un escenario, o incluso que se pone detrás de una barra. Los camareros ligan más que la media, por esa extraña autoridad que les da ser los que tiran las cañas en un antro de moda. Los políticos, que son cucos, saben esto del olor a exitazo, y hacen oposiciones a «tíos poderosos» y luego se ponen hasta harta de fornicar con ordinarias.


  4. A Sarkozy me lo follaría hasta yo, ergo esa teoría falla por algún sitio.


  5. […] 11, 2008 Seis meses después de encallar frente al Peñón, el New Flame sigue hundiéndose por episodios y soltando chapapote a las costas de Cádiz. Sólo la chimenea está a flote y aún desconocemos […]


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